Ahí va un documento sobrecogedor, acerca de las "peripecias" de unos niños colombianos en su camino diario a la escuela.
Viendo esto me viene a la cabeza que yo iba al instituto en moto, teniéndolo a no más de 500 metros de casa. Tardaba más en quitar los candados, sacar la moto, aparcar la moto y ponerle los candados que si hubiera ido andando. Pero claro, llegaba al instituto en moto.
Leído en http://www.manuelgago.org/blog/index.php/2009/11/04/os-nenos-do-cabo/
Creedme cuando os digo que el pueblo colombiano ha tragado quina…y lo que le queda mientras la riqueza esté tan desigualmente repartida.
Increíble lo que tienen que hacer estas criaturas,con una misera cuerda y una polea de lo más rustica,se tiran sin pensárselo ,con un palito como freno, si sobreviven a esto,lo harán a cualquier cosa , vídeos así te abren los ojos…