Otra actriz icono, a la altura (o unos escalones por debajo, mejor dicho, vale) de Audrey Hepburn, pero con una vida mucho más azarosa y trágica, lo que le da el morbo de enfant terrible que la primera no tenía.
La categoría de icono le vino pronto, en 1959, al protagonizar muy graciosamente «Al final de la escapada» (A Bout de souffle), junto a un Jean Paul Belmondo desquiciante.
El comienzo de su tragedia lo podemos situar en la segunda mitad de los sesenta, cuando comienza a apoyar la causa de los indios nativos americanos, e incluso la del movimiento de los Black Panthers. Por ello, el FBI empieza a considerarla peligrosa para el país, y comienza a vigilarla e intervenir sus teléfonos. En 1970, estando embarazada de 7 meses, el FBI difunde la historia de que el padre del bebé no es su marido, sino un miembro de color de los Black Panthers. El bebé nace el 23 de agosto, pero muere 10 días después. En una conferencia de prensa, Jean mostró fotos del feto para demostrar que no tenía ascendencia africana.
A raíz de todo esto entró en barrena, con fuertes depresiones e intentos de suicidio. Aún así tuvo tiempo para casarse en 1979 con un playboy argelino y se establecieron en Barcelona, de de salió por patas hacia Paris al poco tiempo, acusándole de maltratarla.
En agosto de 1979 desapareció durante 11 días, y el 8 de septiembre fue encontrada muerta en el asiento trasero de su coche, debido a una sobredosis de barbitúricos y alcohol, con una nota de suicidio en su mano: «Forgive me. I can no longer live with my nerves.»
jajaja… qué capronius! :))
Más brazo sí que tiene desde luego
Estoy con conejo del 2010. Esta es más mujer.
debo discrepar! le da mil vueltas a audrey.
Que curioso, hace poco me regalaron (y luego leí) un libro de Romain Gary, quien estuvo casado con Jean Seberg y tb se suicidó poco después que ella. Un tipo intrigante:
http://en.wikipedia.org/wiki/Romain_Gary