Mi nombre, Eleanora, era demasiado largo y además nunca me gustó. Especialmente después de que mi abuela lo abrevió y todo el día me gritaba «¡Nora!» desde el porche trasero. Mi padre había comenzado a llamarme Bill porque yo era un marimacho. Eso no me molestaba, pero también quería ser bonita y tener un nombre lindo. Así que me decidí por Billie y lo adopté.
«Lady sing the blues» – Billie Holiday (1956)
httpv://www.youtube.com/watch?v=4iD1yQIGIKE